Muchas veces nos preguntamos que debemos realizar para tener una relación productiva con nuestros prospectos y clientes.
De nuestra experiencia como consultores, considerando aspectos aprendidos en el día a día, siempre nos deja muy buenos indicadores de lo que debemos y no debemos hacer. Los pequeños detalles hacen la diferencia. Sin más, la afinidad que se tiene con la contraparte y honestidad son claves. El hecho de tener credibilidad y que se transmita una comunicación fluida y directa son excelentes indicadores.
Que deberíamos buscar:
Construir una relación a largo plazo (mantén el contacto, personaliza comunicaciones, prioriza)
Compromiso (muéstrale sus necesidades y que puedes confiar en ellos, habla de resultados)
Fortalece las relaciones (Solicita referencias, Aprende a decir que NO, reúnete fuera de la oficina)
Atributos que ellos buscan:
Empatía (radar social, captar que siente, piensan y puede motivar a los clientes)
Independencia (Dedica tiempo a tus clientes, pero equilibrio en imparcialidad y objetividad)
Síntesis (Nuestra visión ayuda a ver patrones y agregar detalles en contexto)
Convicción (Comunícate con confianza y sinceridad, tus recomendaciones tienen peso)
Confianza (Se autentico, mantén contacto visual, cuida el lenguaje corporal)
Finalmente después de responder mentalmente como estamos manejando lo anterior, podríamos hacer rápidamente una auto-evaluación para reforzar nuestro foco en aspectos débiles.